¡Hola Amigos!
Estamos en el ciclo más importante del año Litúrgico; con gran gozo recibimos el nacimiento de Jesús, seguimos su vida, conocimos su infancia y a partir de los 30 años empieza su andadura por su País natal evangelizando, curando enfermos. resucitando los muertos ... ¡cuanto podemos aprender de su vida pública! Llega el último tramo, lo vitorean en Jerusalén, nos deja su Cuerpo y su Sangre en su último Cena y el Viernes Santo entrega su vida para salvar a la Humanidad y con todo su poder resucita el Domingo de Pascua. Jesús sigue algún tiempo con sus apóstoles, aconsejándoles y dándoles fuerza y ánimos para seguir su tarea y cuando llega la hora el Hijo de Dios asciende por su potestad hacia el Cielo donde está sentado a la diestra del Padre como nos explica de manera simbólica el CREDO.
Jesús había cumplido ya su misión pero antes al despedirse de sus discípulos les regala un brote de Esperanza y es que recibirán la ayuda del Espíritu Santo.También nosotros recibimos esta ayuda, Jesús nos dice: "Pedid y se os dará, llamad y se os abrirá", siempre está a nuestro lado, es este amigo fiel que en silencio y sin ruido nos ayuda.GRACIAS SEÑOR POR TU AMOR HACIA NOSOTROS.
Cecilia Aranés Mallol
Misa del Domingo de la Ascensión en la parroquia de San Juan María Vianney
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